Las cocinas integradas son una tendencia que ya lleva algunos años entre nosotros y que gracias a su inmensa funcionalidad y a su elevada carga estética promete seguir marcando la pauta tanto en el diseño, como en la creación de cocinas modernas.
Es que, este tipo de esquema no solo procura crear un ambiente bonito en el cual cocinar a gusto, sino que prioriza que las cocinas sean lugares cómodos, prácticos y seguros en los que el espacio sea aprovechado al máximo, razón por la que son ideales tanto para casas grandes como pequeñas.
Por lo que si estás pensando en darle un cambio a tu cocina, seguro que un diseño integral será todo lo que necesitas. ¿Todavía no te convences? Entonces descubre qué es una cocina integrada y por qué es una buena idea tener una en casa.
¿Qué es una cocina integrada y cuáles son sus principales características?
Las cocinas integradas reciben este nombre porque su diseño busca integrar es un mismo espacio todos los elementos que forman parte de una cocina, como por ejemplo, los muebles y alacenas con los electrodomésticos y el resto de mobiliario con las encimeras, con el objetivo de crear un área 100% funcional, en la que se le saque el mayor partido posible a cada metro cuadrado del espacio.
Todo esto sin renunciar al diseño estético, por lo que la definición de cocinas integradas también pudiera resumirse en el hecho de que se trata de cocinas en las que se potencia el almacenaje, se optimiza la funcionalidad y no se descuida el aspecto visual.
En este sentido, este tipo de cocinas tienen las principales características:
- Muebles modulares
- Electrodomésticos empotrados
- Diseño cómodo y funcional
- Estética elegante
- Cocinas personalizadas y hechas a medida
¿Por qué es buena idea tener una cocina integrada?
Las cocinas integradas proponen una solución para aprovechar al máximo el espacio, aparte tener una de estas en casa es buena idea por las siguientes razones:
Orden y funcionalidad
La integración de mobiliario y electrodomésticos es clave para mantener toda el área en completo orden tanto físico como visual, lo que por ende incrementa tanto la funcionalidad como la comodidad en la cocina.
Optimizan el espacio
Este tipo de cocinas suelen ser hechas a medida, por lo que se adaptan a las exigencias del espacio, lo que las convierte en una excelente opción, sobre todo, cuando se trata de una casa pequeña.
Son fáciles de limpiar
La integración es una gran ventaja al momento de limpiar, ya que facilita las labores de orden, limpieza y mantenimiento.
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